El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, aunque no confirmado en el momento de escribir este artículo, ha generado una gran expectativa tanto a nivel político como económico. En particular, su impacto en los bienes raíces de México es un tema que despierta gran interés debido a la relación cercana entre ambos países y las políticas que el exmandatario estadounidense podría implementar en su regreso al poder.
Desde su primer mandato, Trump adoptó políticas que afectaron tanto las relaciones comerciales entre Estados Unidos y México como las dinámicas del mercado inmobiliario. Si bien su enfoque fue principalmente centrado en la migración y el comercio, el impacto indirecto sobre la industria inmobiliaria de México fue considerable. A continuación, analizamos los posibles efectos de su regreso a la Casa Blanca sobre el sector inmobiliario mexicano.
1. Impacto en la Inversión Extranjera
Durante la presidencia de Trump, hubo una cierta incertidumbre entre los inversionistas internacionales debido a las políticas proteccionistas y la constante amenaza de restricciones comerciales. Sin embargo, a pesar de la volatilidad, México continuó siendo un destino atractivo para la inversión inmobiliaria extranjera, especialmente en áreas turísticas como Cancún, Playa del Carmen, y Los Cabos.
Si Trump regresa al poder, es probable que sus políticas de proteccionismo y su enfoque en el «America First» afecten la confianza de algunos inversionistas estadounidenses. Las tensiones comerciales y las tarifas podrían hacer que algunos actores del mercado inmobiliario busquen refugio en mercados más estables, como México, donde los precios siguen siendo relativamente bajos en comparación con otras naciones. A largo plazo, esto podría resultar en un aumento en la inversión extranjera en propiedades residenciales y comerciales, particularmente en destinos turísticos y ciudades fronterizas.
2. Cambio en las Relaciones Comerciales
Una de las áreas clave que afectará el mercado inmobiliario mexicano será la relación comercial con Estados Unidos, que es crucial para la economía del país. La incertidumbre sobre el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) podría generar volatilidad en el mercado de bienes raíces. Si Trump opta por un enfoque más agresivo, como lo hizo durante su primer mandato, esto podría tener un impacto en la economía mexicana, afectando la confianza de los consumidores e inversionistas.
En el peor de los casos, un deterioro en las relaciones comerciales podría llevar a una desaceleración en la demanda de propiedades tanto residenciales como comerciales, especialmente en áreas cercanas a la frontera. En contraste, una relación más amigable podría fortalecer el mercado inmobiliario, especialmente en las regiones que dependen en gran medida de la inversión estadounidense.
3. El Efecto en las Zonas Fronterizas
Las ciudades fronterizas de México, como Tijuana, Ciudad Juárez, y Nogales, son sensibles a las políticas migratorias y comerciales de Estados Unidos. Durante la presidencia de Trump, la implementación de medidas más estrictas en términos de migración y la construcción del muro fronterizo generaron una sensación de incertidumbre, lo que afectó a muchas industrias locales, incluyendo el sector inmobiliario.
Si Trump regresa al poder y adopta políticas similares, es probable que se genere una disminución temporal en la demanda de propiedades en estas zonas debido a la tensión en las relaciones entre ambos países. Sin embargo, también existe la posibilidad de que algunos inversionistas aprovechen la depreciación temporal de los activos en estas áreas para adquirir propiedades a precios más bajos, lo que podría generar oportunidades a largo plazo.
4. Atractivo para los Retiro de los Estadounidenses
Un aspecto positivo para el mercado inmobiliario mexicano, en particular en destinos turísticos como la Riviera Maya, Puerto Vallarta y San Miguel de Allende, es el continuo flujo de estadounidenses que buscan retirarse en México. Durante la presidencia de Trump, muchas personas de la tercera edad optaron por mudarse a México debido a los costos más bajos de vida y los beneficios fiscales que el país ofrece, como la exención de impuestos para pensionados extranjeros en ciertas regiones.
Si Trump regresa al poder y mantiene su postura en contra de los impuestos y la burocracia estadounidense, esto podría fomentar aún más este flujo de jubilados que buscan propiedades en México. De hecho, la preferencia por destinos como Baja California y Yucatán podría crecer, estimulando aún más el mercado inmobiliario en estas regiones.
5. Impacto en el Turismo Inmobiliario
Trump también es conocido por su énfasis en las políticas que favorecen a los grandes proyectos de infraestructura y la inversión en destinos turísticos de lujo. Si decide impulsar una agenda pro-negocios y promueve la inversión en la construcción de hoteles y resorts en lugares como la Riviera Maya, Puerto Vallarta y Los Cabos, esto podría crear una ola de desarrollos inmobiliarios orientados al turismo, beneficiando a los desarrolladores y aumentando la demanda de propiedades en estas zonas.
Conclusión
El impacto del regreso de Donald Trump a la Casa Blanca sobre el mercado inmobiliario de México es incierto, pero las señales apuntan a que los efectos podrían ser mixtos. Las posibles tensiones comerciales y políticas de migración podrían generar incertidumbre, afectando el mercado en zonas fronterizas y otras áreas sensibles. No obstante, también es posible que los inversionistas vean en México un refugio seguro debido a sus precios competitivos y a su cercanía con Estados Unidos.
Lo que es claro es que el mercado inmobiliario mexicano continúa siendo una opción atractiva para los inversionistas internacionales, y las políticas de Trump, si regresara al poder, podrían actuar como un catalizador o un freno, dependiendo de la dirección que tome su administración. En cualquier caso, la adaptabilidad del sector inmobiliario mexicano y su relación con Estados Unidos seguirán siendo factores clave en su desarrollo y crecimiento en los próximos años.
